Que palabra mas cotidiana, la ansiedad
La ansiedad es una palabra que nos acompaña en nuestro día a día, de hecho, hace estragos con nuestro bienestar mental. ¿Ahora, por que hablo de palabra y no emoción? porque la cercanía que tenemos con ella es directamente proporcional y nuestra cercanía con el cielo. La ansiedad está en todas partes, pero no tenemos ni la menor idea de cómo llevarla sin hacernos daño. He ahí el dilema; nos enfocamos en encontrar una pastilla que calme la emoción, pero lo cierto es que darle una pastilla a la señora ansiedad es darle un tetero para contentarlo mientras pasa el efecto, sin embargo, seguirá allí.
Lo mismo pasa con la terapia, de hecho, vamos a terapia muchas veces a que el psicólogo o psiquiatra nos diga algo que nos haga sentir mejor; pero el segundo que nos vamos del consultorio no aplicamos ni una sola palabra de lo que se nos dijo, nos gusta vivir en el mundo intelectual y no de la experiencia. Intelectualizamos la información y no nos esforzamos por aplicar las herramientas.
Te preguntarás por que sé esto tan detalladamente… PORQUE LO HE VIVIDO, FUI, SOY Y SERÉ PACIENTE. Lo hago para poder entender a mis pacientes y estar constantemente en sus zapatos. Si ellos son ansiosos, yo me llevo el premio de la ansiedad.
Lo cierto es…. Y aquí va tu pastillita…
La ansiedad JAMÁS se irá de tu lado, ni de tu mente, nunca. Si te dijeron que iba desaparecer, es mentira.
Lo que SI puede cambiar es la percepción que tienes frente a ella, tu relación con ella, cómo la puedes utilizar a tu favor. LA ANSIEDAD ESTÁ ALLÍ PARA AVISARTE QUE TE ESTÁS ADELANTANDO A SITUACIONES QUE NO HAN PASADO AÚN, TE PIDE QUE TE MANTENGAS EN EL PRESENTE.
Se que genera preocupación, ¿entonces qué puedes hacer? Ocúpate. También te habla para decirte que dejes de ser tan controlador.
Finalmente, mi aprendizaje con la ansiedad es que no puedo controlar la vida de nadie, ni lo que me sucede y que NO TODO LO QUE QUIERO Y COMO LO QUIERO, ES LO QUE NECESITO. No calmes la ansiedad, léela correctamente, no entres en ataques de pánico, identifica lo que te pasa… ¡A veces no podemos solos, es bueno tener retroalimentación de unos oídos estructurados! Unos oídos que quieran escucharte de la misma manera que quieres hablarles
La ansiedad te enseña a ACEPTAR la situación. Esto no implica que no hagas nada y seas cómodo; implica que sigas siendo disciplinado, sé generoso con la disciplina. Ejerce la disciplina hasta perder el deseo de recibir algo a cambio de la vida.
Entonces sí, hacer conscientes tus emociones, te ayudará a tener una mejor relación con la ansiedad.