La frustración en niños nos lleva a cometer errores como padres.
Usualmente se confunde el hecho de ser un buen padre con la permisividad o con ser rígido; el éxito está en mantenerse en un punto medio y comprender que, cuando se dice “no”, se logra poner límites sanos dentro de la mente de un infante llegando a negociaciones entre ambas partes.
Algunos métodos para enseñar a los pequeños a tener tolerancia ante la frustración son los siguientes.
Evitar la sobreprotección y el exceso de permisividad
Cuando se ejerce fuertemente la sobreprotección, se limita el aprendizaje del infante para que logre afrontar el fracaso. Es importante que el niño tenga logros por sus propios medios dependiendo de la edad, pues, si se les ayuda en todo, habrá sentimientos de dependencia constante hacia las figuras primarias y lleva a la frustración en niños. Por otro lado, la permisividad limita el aprendizaje de normas que más adelante ayudarán a afrontar conflictos exitosamente.
Ser ejemplo
La mejor forma de enseñar algo no es con regaños al niño, sino siendo ejemplo, es decir, mostrar al infante cómo se afrontan los problemas y las dificultades, evidenciar cómo los padres caen y se levantan de dichos obstáculos. Regañar o castigar será una manera de reforzar el mal comportamiento.
Apoyo para identificar sus emociones
Cuando hay rabietas, es importante lograr identificar por qué se presentan, pues la mayoría de veces se generan por motivos ajenos a lo que está sucediendo. El hecho de identificarlas promueve una mejor gestión de estas, así, se le pueden hacer preguntas como: ¿por qué estas triste?, ¿qué puedo hacer por ti?, te escucho y entiendo tus emociones, me pasa lo mismo, etc.
Enseñarle a pedir ayuda
Es importante que no sienta incapacidad de solicitar ayuda a alguien, esto permitirá fortalecer sus habilidades y reconocer debilidades, asimismo, sabrá que, para tener logros, se necesita, en ciertas oportunidades, de más personas.
Dejar que tenga errores
La equivocación, a menudo, se le atribuyen factores negativos, pero lo cierto es que, a través de los errores o caídas, puede aprender; limitarle esa experiencia es limitar el aprendizaje.
Leer cuentos infantiles que hablen del tema
Esta es una excelente opción ilustrativa para mostrar posibles reacciones que se pueden tener de referencia cuando se está frente una situación frustrante, por ello, es una manera lúdica de comprensión.
Normalizar el hecho de perder
A través del ejemplo de los cuidadores y los juegos, se le puede restar importancia a perder e incrementar el hecho de tener la experiencia, disfrutar y pasar tiempo en familia o con amigos.
Reforzar el proceso y no el objetivo/meta
Con esto, se refuerza el hecho de que el esfuerzo, las acciones y los aprendizajes en ese camino son más importantes que el logro final; se le sacará el doble de provecho a las situaciones.
Salir o relajarse frente al estado de frustración
La comunicación y explicar lo que pasa, salir al aire libre, escuchar música o jugar son excelentes actividades ante la frustración, no obstante, lo importante es tener conductas frente al niño, estas de tipo preventivo y no correctivo.
Ejercicios cotidianos que refuercen su paciencia
No solo actividades, sino no entregarle todo de forma rápida, por ejemplo, se comió un chocolate, pero ahora quiere una paleta; es preciso manifestarle que se le entiende y se ha pasado por lo mismo, pero mañana puede ser un día para comer el resto. El niño seguirá llorando, pero se debe dar manejo a la emoción y no ceder, por ello, es necesario centrarse en el manejo del sentimiento, para que sepa que no todo lo que quiere es lo que necesita.
La frustración es una parte normal de la vida de los niños, pero es importante recordar que hay formas saludables de lidiar con ella. Debemos ayudar a los niños a desarrollar habilidades para afrontar la frustración de manera constructiva, ofreciendo un entorno seguro y respetuoso, creando límites claros, y proporcionándoles estrategias para manejar sus emociones. Al hacer esto, los niños pueden aprender a convertir la frustración en motivación para alcanzar sus metas y tener éxito en la vida.
Cita con psicóloga para niños
Empoderar a mis pacientes es primordial en mis terapias. Todos somos humanos y estamos hechos de lo mismo. Agenda una cita soy un apoyo para ti, contarás conmigo porque estar presente en la vida de alguien es clave para encontrar respuestas a problemas que tal vez no le vemos salida. En cualquier momento puedes escribir en nuestro contacto para recibir más información.